Pasar el Testigo
A lo largo de los años, he tenido el privilegio de viajar por Francia y alrededor del mundo, exhibiendo mi obra y compartiendo mi visión con públicos diversos. Mis viajes me han llevado desde grandes ciudades hasta pequeños pueblos, donde he tenido la oportunidad de colaborar con escolares, estudiantes de secundaria y universidad, y especialmente con los más jóvenes. Mi compromiso siempre ha sido transmitir, a través de estos encuentros, el mensaje esencial de mi “arte con la naturaleza”.
Estas interacciones con las generaciones más jóvenes están en el corazón de mi enfoque artístico. Para mí, representan un verdadero relevo, un “testigo verde” que me enorgullece pasar. Mi trabajo no se limita a la creación artística; encuentra su significado pleno en el compartir, en el intercambio y, sobre todo, en la sensibilización sobre las problemáticas ambientales.
Hoy, me complace ver que este arduo trabajo ha encontrado una resonancia especial, particularmente en la Universidad de Chicago, que ahora dedica un programa a mi arte. Este reconocimiento me toca profundamente, ya que ilustra el impacto y la relevancia de mi enfoque.
Pero este relevo no se detiene aquí. Sigo trabajando para transmitir esta llama verde, este vínculo inquebrantable entre la humanidad y la naturaleza. Recientemente, en Cuba, continué con esta misión, convencido de que el futuro de nuestro planeta descansa en las manos de aquellos que escucharán, respetarán y trabajarán con la naturaleza.